La Salud no depende de un solo nivel de nuestro organismo, depende del equilibrio que existe entre los niveles que lo componen, tanto el estructural, como el químico y el emocional, y el sistema inmunitario que trabaja para nosotros y en unión con el entorno, así como hace la parte bioenergética que también trabaja para la comunicación de todos estos niveles.
Para que nuestra salud funcione bien tenemos que estar en este equilibrio, dentro de la palabra “holística”.
El cuerpo nos habla de sus necesidades, solo cabe saber preguntarle y escucharle, esto se puede hacer gracias a la kinesiología holística.
La palabra KINESIOLOGIA significa “estudio del movimiento”.
La palabra HOLÍSTICA viene del griego “holos” =“todo”: “UN TODO ORGANICO UNITARIO”
Así comprobamos que el cuerpo es una “unidad” y nunca debemos tratar un nivel sin tener en cuenta los restantes.
Cuando conseguimos un equilibrio en los niveles mencionados, cuando el sistema inmunitario y el energético se entrelazan en profundidad, cuando nuestras raíces terrenales y cósmicas se integran, empezamos a acceder a la información intuitiva (espiritual) que nos permite, gracias a los cambios de conducta que surgen de forma fácil y natural, mantenernos en estado de salud resultante de una constante adaptación en y a la Vida, hacia el Amor y la pérdida del Miedo.
El estado de salud no es un estado estático, el organismo lleva su dinámica de adaptación a la vida, a su medio ambiente, etc.
Esa dinámica y la adaptación a esa dinámica es la Salud.
Nuestra salud depende de la capacidad de adaptación, aceptación y evolución dentro de este sistema.
En este ‘equilibrio natural’ para nosotros, del que ‘provenimos’, yace la Salud.
Todas las técnicas y terapias naturales implican devolver a nuestro organismo y a nuestra conducta en general a una actitud de “lógica vital” utilizando las fuerzas intrínsecas en nuestra naturaleza de humano para el reencuentro con la salud como el “hecho más natural del mundo”.
En los últimos 150 años, con la aparición y expansión de las industrias, el consumo desmesurado, el stress al que nos hemos sometido tanto a nosotros mismos como a nuestro planeta nos está llevando a un estado de competición constante y estrés.
Todo esto proporciona un terreno ideal para todos esos importantes y extraños problemas en la salud que padecemos actualmente.
Tenemos que comprender y eliminar los hábitos que dañan o bloquean nuestro organismo, hábitos alimenticios, de higiene estructural como malas posturas, la elección de entornos tóxicos, etc...
La causa de la mayoría de las enfermedades tiene su origen en los bloqueos de los sistemas de adaptación.
Trabajando con las varias técnicas holística y naturales, conseguiremos devolver al cuerpo sus máximas capacidades de adaptación, y de recuperación de la salud por su propia naturaleza.